Museo del Louvre París, Francia |
A la vuelta del sol
distraemos almanaques,
crujimos sombras y perfumes,
redimimos coordenadas.
De pronto,
hoja ráfaga pisada,
se agitan bailes ocres.
Giran síncopas al sesgo,
giran entre tonos y suspiros.
A despecho de Pitágoras,
el equinoccio
interpreta su propia sinfonía
y desciende
sobre la mitad del mundo.
Lina Caffarello
distraemos almanaques,
crujimos sombras y perfumes,
redimimos coordenadas.
De pronto,
hoja ráfaga pisada,
se agitan bailes ocres.
Giran síncopas al sesgo,
giran entre tonos y suspiros.
A despecho de Pitágoras,
el equinoccio
interpreta su propia sinfonía
y desciende
sobre la mitad del mundo.
Lina Caffarello
De "Impromptu".
No hay comentarios:
Publicar un comentario